“La
duda es el principio del conocimiento humano, y la certeza de su existencia”
La edad media, no fue nada oscura, sino de luz, ya que allí
se realizaron grandes inventos, libros y nuevos pensamientos filosóficos pero todos estos fueron cohibidos por la entidad eclesiástica del momento, se denomina oscura debido a
que se ocultó mucha información filosófica que criticaba los estamentos de la
iglesia, al llegar el S XVI, un hombre con un gran intelecto y discernimiento
del mundo, marco el punto de inflexión entre el pensamiento medieval, renacentista
y el propiamente moderno. Rechazó el principio de autoridad y puso a su propia razón
como juez de toda opinión existente instaurando así, la subjetividad europea
moderna, busco la certeza más que la verdad, y estableció un método para
conseguirla. De lo que se desarrollaría el inicio al pensamiento científico,
ese gran filósofo fue Rene Descartes, considerado el padre de la modernidad.
Descartes es quien marca el final del medioevo y de las
ideas antiguas, anteponiendo un método de investigación científico, más
fidedigno a la realidad, no solo aporto en el campo filosófico, sino que también
se adentró a las matemáticas, geometría y
la ciencia, en sí, su filosofía busca un camino coherente para encontrar esa
verdad, con un método que maneje una idea fiable de esta, no, esa idea confusa
carente, sino algo un poco más confiable, esto lo hace relucir en el discurso
del método, de cómo sería la fórmula de encontrar esa verdad.
Descartes dudaba de todo lo que veía pero solo estaba
seguro de algo, y es de su duda misma, de que el cómo ser pensante estaba
dudando y si el dudaba es razón de existir, es la composición de tener unas
capacidades intelectuales. Y de esa certeza muy paradójica de la duda, da
origen al pensamiento moderno. En encontrar nuevas verdades, y darle el
beneficio de la duda a la ya existentes.
Tiene unas leyes para iniciar ese método científico, la
primera, es no aceptar nada que no fuese evidente a la propia razón, la
segunda, dividir tantos problemas en tantas partes en que se pudiese, la
tercera, ir de lo más simple a lo más complejo, y la cuarta es hacer revisiones
exhaustiva para verificar que nada fuese olvidado. En sí, en el Discurso del
método, el cual es una de las obras más relucientes de este filósofo, busca hallar
un principio sólido y seguro que sirva de fundamento a un saber firme, riguroso
y de carácter universal.
Dicho principio lo encontró en la capacidad de la propia
razón. En efecto, según el pensamiento cartesiano, la razón, por sí misma,
partiendo de sus propios principios y sin atender a nada ajeno a ella misma,
puede llegar a conocer la totalidad de las realidades existentes. Todo es
cuestión de seguir el método adecuado. ¿Y cuál es este método adecuado? la
marcha natural propia de la misma razón.
Este pensador francés quería encontrar una forma de
sustentar los conocimientos de su época. El creía que el conocimiento sensible,
el que parte de los sentidos era erróneo, pues muchas veces los sentidos según el se equivocan.
El conocimiento para Descartes, debe estar cimentado en algo que dé más seguridad que
los sentidos, ahora bien, Descartes dice que como todo conocimiento es sensible,
va a dudar de todo cuanto ha aprendido. Empieza a dudar de lo que sabe, duda de
Dios, duda de la vida etc. Pero se da cuenta que hay algo de lo que no puede dudar
y es el hecho de que duda, es decir, no puede dudar de su duda, esto lo lleva a
considerar que si duda es porque es algo, si duda es porque piensa, de allí “el
cogito ergo sum”.
El “pienso “de este filósofo, no es el simple, sino es el
que va más allá, al proceso metal de meditación, análisis. En sí, existe una semejanza
a los mundos platónicos, ya que el plantea que debemos salir y buscar una
verdad más fiable, lo cual sería lo inteligible.
Descartes fue una persona privada en sus reflexiones, al no ser profesor y no tener cátedra, vivió de una manera discreta por miedo a
despertar una tensión peligrosa de la añeja inquisición, su vida, la arraigo,
pensando en sí mismo, en en su filosofía, da credibilidad a la duda,
anteponiendo está a toda tradición, costumbre y pensamiento. No creer en todo
lo que nos cuentan sino dudar de ese todo. El hombre debe buscar la certeza a
partir de lo que nosotros mismos podemos desarrollar, ninguna opinión antes
dicha, por venerable que sea, debemos darle igual el beneficio de la duda y buscar
por nosotros mismos si en verdad es así. Ya que muchos de los filósofos del
medioevo, colocaban las ideas de los antiguos griegos como las únicas verdades irrefutables, Descartes no se acumuló a esto, no aceptaba estas nociones
antiguas de esos grandes maestros como las únicas verdades absoluta, en sí, Descartes
es el padre de la duda a todo lo existente.
Tuvo una gran ayuda, y fue la posición económica de su
familia, eso le permitió entrar de lleno a la educación, debido igual al esmero
de su padre de que Rene, fuera un grande, siempre se destacó desde su llegada a
la educación, primeramente en la escuela jesuita, se hizo notar en filosofía, lógica
y matemática, y luego se graduó como licenciado en derecho. Su estimulo hacia
la ciencia fue Beeckman, y fue desde su incursión en la vida militar donde
comenzaron esos dotes, la frase “pienso luego existo” es una de las más
celebres en el mundo entero, y el legado de este gran pensador, jamás ha sido
olvidado.
Muchas
gracias